lunes, 29 de noviembre de 2010

¿CÓMO ENTONAR LOS CÁNTICOS ESTA SEMANA?

Por algunas situaciones que se han escapado de control han pasado dos semanas sin publicarse esta sección, por lo cual me disculpo. Esta semana está de regreso, aunque lamento comentar que por hoy están disponibles solo los tres cánticos que se utilizarán en el Estudio Bíblico de Congregación, la Escuela del Ministerio Teocrático y la Reunión de servicio. Según las posibilidades en los próximos días colocaré los del día domingo. Agradezco su comprensión.
Como verán, a partir de esta semana se agregó una nueva característica a esta sección, llamada “Tempo” e indica el ritmo del cántico o la característica con que debe entonarse, lo que también ayudará a saber cómo cantarlo.

Para descargar las melodías sin acompañamiento haga clic en alguno de los dos vínculos siguientes.

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Cántico 082— Seamos humildes como Cristo
Tempo: Suave
Tipo de cántico: Canción espiritual
Dirigido a: la congregación, nosotros mismos
Cómo cantarlo: Aunque Jesucristo era uno de los príncipes prominentes de la región espiritual se humilló a sí mismo y bajo a la tierra, y aunque su conocimiento y sabiduría es superior a la de cualquier hombre que haya vivido en este planeta nunca fue engreído, sino más bien, humilde de corazón. En la actualidad podremos tener talentos que otros hermanos no, pero estos hermanos tienen talentos que nosotros no. De cualquier forma, reconozcamos nuestras limitaciones y nunca nos creamos más que los demás por nuestros conocimientos, habilidades o privilegios, ¡somos todos hermanos! Cante con sinceridad.

Cántico 129 — Aferrémonos a nuestra esperanza
Tempo: Intenso
Tipo de cántico: Canción espiritual
Dirigido a: la congregación
Cómo cantarlo: Los hombres van rumbo a su destrucción, todos sus planes para un futuro seguro han fracasado y no podemos esperar que nos den seguridad mundial ni paz. Sin embargo, nunca perderemos la calma sin importar las circunstancias ¡Cristo ya reina en los cielos y el nuevo mundo está muy cerca! Cante con júbilo y vigor.

Cántico 132 – Canción de victoria
Tempo: Ritmo de marcha moderado, triunfal
Tipo de cántico: Alabanza
Dirigido a: Jehová
Cómo cantarlo: El poderoso Faraón fue humillado al morir junto a sus tropas en el mar rojo. Hoy esta historia la pasan por alto los altivos gobernantes mundanos quienes desafían a Jehová y su Hijo Rey, ¡qué equivocados están! ¡Se enfrentan al todopoderoso Dios, el invencible Jehová! Humillados reconocerán que Jehová es Dios y cuando eso suceda uniremos nuestras voces para cantar la Canción de Victoria. Cante con júbilo y vigor.

¿HA SENTIDO LA INFLUENCIA DEL ESPÍRITU SANTO?

“Sobre nosotros sea derramado el espíritu desde lo alto”
—Isaías 32:15—

TIEMPO APROXIMADO DE LECTURA: 6 MINUTOS

Mientras cantan y oran, una electrizante fuerza se apodera de sus cuerpos haciendo que hablen palabras en lenguas desconocidas, caigan al suelo, lloren o incluso griten. Las personas que han pasado por dicha experiencia afirman haber sentido en su cuerpo la influencia del espíritu Santo. ¿Alguna vez la ha sentido usted? ¿Ha sido testigo ocular de eventos como el que se mencionó al principio? Para numerosas iglesias protestantes estos eventos no son nada fuera de lo común y creen que es prueba contundente de que Dios los dirige y les da su espíritu. ¿Qué dice la Biblia? ¿Son estas acciones obra del espíritu santo? ¿Cómo influye el espíritu santo en su cuerpo y su mente?

Cristo dejó la tierra hace cerca de dos mil novecientos años, pero prometió a sus seguidores: “estoy con ustedes todos los días hasta la conclusión del sistema de cosas” (Mateo 28:20). Es cierto que ya no está físicamente pero guía a sus discípulos mediante el espíritu Santo, el “ayudante” prometido (Juan 14:16, 17). En el siglo primero este espíritu daba dones milagrosos a los discípulos ungidos de Cristo como hablar en lenguas, tener conocimiento milagroso, profetizar, curar enfermos ¡y hasta levantar muertos! Esto probaba que el cristianismo —una “nueva religión” en esa época— tenía la aprobación divina. ¿Sucede lo mismo en nuestros días? El apóstol Pablo señaló: “sea que haya [dones de] profetizar, serán eliminados; sea que haya lenguas, cesarán; sea que haya conocimiento, será eliminado” (1 Corintios 13:8). ¿Cuándo sucedería esto? El apóstol señaló: “Porque tenemos conocimiento parcial y profetizamos parcialmente; pero cuando llegue lo que es completo, lo que es parcial será eliminado” (v.v. 9, 10). En ese entonces la congregación cristiana era joven y era necesario que se probara con obras milagrosas que ese era el camino de la salvación. El conocimiento de ellos era limitado, parcial. Pero Jehová predijo que en los últimos días ‘el conocimiento se haría abundante’ (Daniel 12:4). Es interesante ver que en esa profecía de Daniel se vincula el brillo “de los que tengan perspicacia” y el hecho de que ‘muchos discurrirían’ durante el tiempo del fin —que empezó en 1914—. Tanto los que tienen perspicacia como los que ‘discurrieron’ para hallar el conocimiento verdadero son los cristianos ungidos, a quienes Cristo nombró como esclavo sobre todos sus bienes terrestres en 1919 (Mateo 24:45). Puesto que desde 1919 el conocimiento se ha hecho más abundante, hemos alcanzado lo que el apóstol Pablo llamó “lo que es completo”, así que ya no es necesario probar con obras milagrosas que esta es la religión verdadera. Más bien, como dijo el apóstol Pablo antes de mencionar que los dones milagrosos terminarían: “el amor nunca falla”, y después dijo: “Ahora, sin embargo, permanecen la fe, la esperanza, el amor, estos tres; pero el mayor de estos es el amor” (1 Corintios 13:8, 13). Y tal como Cristo dijo, lo que hoy distingue a sus verdaderos seguidores es el amor que tienen entre sí, y no las obras milagrosas (Juan 13:35). Entonces, ¿son las experiencias extra normales que ocurren en muchas iglesias obra del espíritu santo?

La Biblia da evidencia de que no. Agreguemos otros detalles. Puesto que el espíritu Santo obró en la escritura de la Biblia es lógico creer que hoy no actuaría de forma contraria a lo que la Palabra escrita de Dios dice, ¿verdad? Cuando vemos personas que afirman hablar en lenguas por obra del espíritu santo vemos una clara contradicción a la instrucción inspirada que se registra en 2 Corintios 14:27, 28 que dice: “¿Quieren hablar en lenguas? Que lo hagan dos o tres al máximo, pero con limitación de tiempo, y que haya quien interprete. Si no hay nadie que pueda interpretar, que se callen” (La Biblia Latinoamericana, 1995).

También cuando se ve a personas cayéndose, llorando o gritando por “obra del espíritu santo” es evidente que no tienen control sobre su propio cuerpo, pero de nuevo la Palabra Inspirada de Dios nos dice: “Por otra parte, el fruto del espíritu es: amor, gozo, paz, gran paciencia, benignidad, bondad, fe, apacibilidad, autodominio”. Y es evidente que acciones como las descritas antes no son producto de la paz, la apacibilidad y el autodominio, entonces, ¿cómo podríamos decir que son obra del espíritu Santo? Entonces, ¿existen realmente tales sucesos? La respuesta es un claro “sí”, pero, sin no es obra del espíritu Santo, ¿de dónde proviene? ¿Acaso no se ha logrado mucho bien con este tipo de obras curando enfermos y librado a endemoniados? Jesucristo no pasó por alto este detalle. En su gran profecía sobre los últimos días dijo: “Surgirán falsos Cristos y falsos profetas que harán grandes señales y milagros para engañar, de ser posible, aun a los elegidos” (Mateo 24:24, Nueva Versión Internacional). También dijo: “Muchos me dirán en aquel día: ‘Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios, y en tu nombre ejecutamos muchas obras poderosas?’. Y sin embargo, entonces les confesaré: ¡Nunca los conocí! Apártense de mí, obradores del desafuero” (Mateo 7:22, 23). Por lo tanto estas obras no provienen del espíritu santo, sino del enemigo de Jehová, quien procura extraviar a las personas y llevarlas a la destrucción.

Y si el espíritu Santo ya no actúa produciendo milagros, ¿cómo actúa? No hay porqué dudar de que hoy el espíritu Santo sigue ayudando a los cristianos verdaderos. Jesús lo prometió como un ayudante y lo llamó “el espíritu de la verdad” (Juan 15:26). Interesantemente Jesús habló de que cuando sus discípulos recibieran el espíritu debían dar testimonio de él (v. 27). También, antes de ascender al cielo dijo que por recibir espíritu Santo serían testigos de él “hasta la parte más distante de la tierra” (Hechos 1:8). Y como la evidencia demuestra, solo los testigos de Jehová han logrado llegar “hasta la parte más distante de la tierra” llevando las buenas nuevas del Reino y haciendo que personas de todas las naciones adoren unidas a Jehová. Esta unidad doctrinal y el amor que se encuentra en esta organización es única en el mundo, porque recordemos que la parte más importante del fruto del espíritu santo es el amor. No hay duda, entonces, de que hoy el espíritu Santo dirige nuestra predicación y participa activamente en nuestra labor a fin de que sigamos teniendo unidad mundial y demostrándonos amor unos a otros en medio de un mundo dividido. También, tal como dirigía en el siglo I las decisiones que tomaba el Cuerpo Gobernante, hoy Jesús sigue usando el espíritu Santo que recibió de su Padre a fin de dirigir a este grupo de cristianos ungidos (Hechos 15:28). Dirige, también, el nombramiento de ancianos y siervos ministeriales en cada congregación (Hechos 20:28). Pero, ¿cómo influye en usted personalmente?

No dude en que sí influye en cada uno de nosotros de forma individual, pues Jesús nos instó a pedirlo insistentemente y a tener la confianza en que Jehová nos lo concederá (Lucas 11:12, 13). Recuerde que este es el “espíritu de la verdad” y que, puesto que la Biblia fue inspirada por Dios y que al ser escrita “hombres hablaron de parte de Dios al ser llevados por espíritu santo”, para entenderla con exactitud es necesaria la guía del espíritu santo (2 Pedro 1:21). El conocimiento pleno de las escrituras que usted pueda poseer se lo debe a la acción del espíritu santo. ¿La ha sucedido alguna vez que recuerda un pasaje bíblico justo en el momento en que lo necesita? Esto también es, sin duda, obra del espíritu santo, pues Jesús prometió: “Mas el ayudante, el espíritu santo, que el Padre enviará en mi nombre, ese les enseñará todas las cosas y les hará recordar todas las cosas que les he dicho” (Juan 14:26). Hay otras formas más claras en que el espíritu santo se evidencia. Cuando atravesamos dificultades y pedimos ayuda a Jehová, él nos responde con espíritu santo y nos da “la paz de Dios que supera a todo pensamiento [y que] guardará sus corazones y sus facultades mentales mediante Cristo Jesús” (Filipenses 4:7). Las personas que ya han pasado por esta experiencia saben a qué se refería el apóstol Pablo al decir que se recibe paz “que supera todo pensamiento”. Así que, no dude ni un segundo de que el espíritu Santo le ayudará en los momentos en que más lo necesite. Es importante, sin embargo, tener conocimiento exacto y fe para recibir este espíritu. El hecho de que ya no se vean milagros por obra del espíritu Santo no es un indicio de que ya no actúa en nosotros. ¡Hoy está más activo que nunca dirigiendo la predicación, y pronto se verá más claramente su influencia cuando venga la guerra de Armagedón! Sigamos, pues, pidiendo a Jehová: “Sobre nosotros sea derramado el espíritu desde lo alto” (Isaías 32:15).

jueves, 18 de noviembre de 2010

¿CÓMO VER LA PLANIFICACIÓN FAMILIAR?

“Los hijos son una herencia de parte de Jehová; el fruto del vientre es un galardón. Feliz es el hombre físicamente capacitado que ha llenado su aljaba de ellos.
—Salmo 127:3, 5—

TIEMPO APROXIMADO DE LECTURA: 4 MINUTOS

En el antiguo Israel el tener hijos era un gran privilegio y un galardón. La esterilidad se consideraba una maldición (Compare con Génesis 30:1). Sin embargo, al pasar los siglos y al cambiar el mundo el punto de vista sobre los hijos ha cambiado. Hoy día, muchas personas prefieren permanecer sin hijos debido a la situación económica, o simplemente porque desean evitar las responsabilidades y obligaciones que esto conlleva. La pregunta es, ¿debería un cristiano usar métodos anticonceptivos? De más trascendencia aún, ¿debería someterse a un proceso de esterilización? ¿Cómo podría afectar esto en su relación con Dios o sus privilegios de servicio?

El Salmo en que se basa el tema de esta semana habla de los hijos como una herencia de parte de Jehová. Los hijos son comparados a flechas en la mano de un hombre poderos, y pronuncia feliz al hombre que ha llenado su aljaba (la aljaba era una pequeña caja portátil para guardar flechas) de esas “flechas”, es decir, los hijos (Salmo 127:4). Nos para tomar con poca seriedad este salmo. Desde el principio de la humanidad Jehová dio el mandato “Llenen la tierra” (Génesis 1:28). Tras la destrucción del mundo antediluviano Jehová dio a Noé la misma exhortación (Génesis 9:1). Queda claro que una de las responsabilidades dadas, tanto a Adán y Eva, como a Noé, su esposa, sus hijos y sus nueras era el de reproducirse. Por muchos siglos se consideró así el asunto de los hijos dentro del pueblo de Dios, Al grado que Ana, la esposa de Elqaná era humillada y ella misma se sentía desdichada por no tener hijos (1 Samuel 1:1-8). Las familias grandes eran respetadas en el antiguo Israel, y todos los hijos eran considerados una herencia de parte de Jehová. Por lo tanto, el don de la reproducción era algo muy respetado. De hecho, uno de los propósitos de los matrimonios era el de tener hijos. En vista de esto, ¿cómo deberíamos ver los cristianos el asunto de tener hijos?

Como vimos, en la antigüedad el tener hijos era un asunto muy bien visto. Sin embargo, las cosas cambiarían con el tiempo. Por ejemplo, Jesús mismo nunca tuvo hijos, y el apóstol Pablo tampoco. Sabemos que el apóstol Pedro era casado, pero no sabemos si tenía hijos o no. En una ocasión Jesús dijo: “hay eunucos que a sí mismos se han hecho eunucos por causa del reino de los cielos. Quien pueda hacer lugar para ello, haga lugar para ello” (Mateo 19:12). Es cierto que Jesús hablaba del don del matrimonio y la opción de la soltería que algunos escogerían para poner el Reino en primer lugar. Sin embargo, el permanecer soltero por causa del Reino implica el no tener hijos, y esto de ninguna forma falta el respeto por el don de la reproducción.
Aunque es cierto que en la antigüedad el que una mujer no tuviera hijos se consideraba casi una maldición, no encontramos en las Escrituras Griegas Cristianas un mandato que indique que todos los matrimonios deben permanecer sin hijos. Algunas personas objetan diciendo que el único objetivo lícito de las relaciones sexuales dentro del matrimonio es el tener hijos, pero la Biblia no enseña eso. El libro bíblico de Proverbios usa lenguaje figurado que indica que las relaciones sexuales no son sólo para tener hijo, pues dice: “Bebe agua de tu propia cisterna, y chorrillos que salgan de en medio de tu propio pozo. [...] Resulte bendita tu fuente de aguas, y regocíjate con la esposa de tu juventud, una amable cierva y una encantadora cabra montesa. Que sus propios pechos te embriaguen a todo tiempo. Con su amor estés en un éxtasis constantemente” (Proverbios 5:15, 18, 19). Es obvio, entonces, que las relaciones sexuales dentro del apropiado marco del matrimonio pueden derivar gozo, además de ser una forma saludable de demostrar cariño y ternura al cónyuge.

Podríamos agregar otro razonamiento. Si alguien dice que no deben usarse métodos anticonceptivos (lo que implicaría que la mujer tuviera cuantos hijos pudiera) debería pensar en lo siguiente, ¿está su situación económica en la condición apropiada para dar todo lo que el niño necesita materialmente? Las cosas básicas son: comida, ropa, un hogar digno y educación. Si no lo está, su pecado sería muy serio, pues el apóstol Pablo dijo: “Ciertamente si alguno no provee para los que son suyos, y especialmente para los que son miembros de su casa, ha repudiado la fe y es peor que una persona sin fe” (1 Timoteo 5:8).

En vista de que la situación mundial y las necesidades y condiciones de cada familia han cambiado, y si además agregamos que bajo el arreglo cristiano no se establece que los matrimonios obligatoriamente deben tener hijos, debemos aplicar el principio bíblico expuesto en Gálatas 6:5: “Porque cada uno llevará su propia carga de responsabilidad”. No está en derecho de nadie mandar lo que cada matrimonio decidirá, pues, como dijo el apóstol Pablo: “¿Quién eres tú para juzgar al sirviente de casa ajeno? Para su propio amo está en pie o cae. En verdad, se le hará estar en pie, porque Jehová puede hacer que esté en pie” (Romanos 14:4). En realidad, la decisión de tener o no hijos es algo entre cada matrimonio y Jehová, y no nos compete juzgar sus decisiones.

Es obvio que, como queremos agradar a Dios evitaremos también prácticas como el aborto, o métodos anticonceptivos que actúen después de que la concepción se ha realizado, como la píldora del día después, pues claramente se estaría cometiendo un pecado sumamente serio a los ojos de Dios: el homicidio, y claro está, los homicidas no heredarán el Reino de Dios.

¿Qué hay de los procedimientos de esterilización? Tomemos como ejemplo la vasectomía. Allá, en 1975 La Atalaya del 15 de agosto dijo: “En vista de estos puntos bíblicos, debe ser evidente que el dar a luz hijos tiene aprobación divina. De consiguiente, sería incorrecto el que uno se sometiera a la esterilización o aprobara la esterilización de su esposa simplemente porque no aprecia el don de Dios de las facultades de procreación” (Página 509). Se explicó que, aún así, cuando un embarazo pudiera poner en peligro la vida de la madre o el bebé, el considerar la esterilización como método de control de la natalidad era un asunto de cada matrimonio, y hasta dijo respecto a la esterilización masculina: “No es el cuerpo de él el que tiene una matriz debilitada. Sin embargo, si su conciencia le permite la esterilización, quizás prefiera ser él el que se someta a la operación, en vez de hacer que su esposa se someta a cirugía adicional. Su conciencia puede o no puede permitir que lo haga.” Tomemos en cuenta que en esas fechas la vasectomía se consideraba irreversible. Sin embargo, al pasar los años y los científicos lograron que la vasectomía fuera, en muchos casos, reversible. La Atalaya del 1 de mayo de 1985 declarara que este es un asunto de conciencia, en el cual nadie debe intentar influir.

Esa revista decía: “Puesto que las Escrituras Griegas Cristianas no dan guía directa sobre estos asuntos, los cristianos tienen que tomar su propia decisión en lo que toca a limitar el tamaño de su familia y respecto al control de la natalidad” y luego dijo: “Si la pareja está pensando en la esterilización como método para el control de la natalidad, aún así debe considerar si sus acciones pudieran afectar de alguna manera a otras personas. Aunque por lo general las parejas casadas no hacen pública su decisión sobre el control de la natalidad, si se supiera por todas partes que cierta pareja había recurrido a la esterilización voluntaria, ¿perturbaría esto muchísimo a la congregación y le perdería ésta el respeto? (1 Timoteo 3:2, 12, 13.) Éstos son factores que hay que considerar con mucha seriedad, incluso en este asunto privado y personal. Después de haberlo considerado todo, la siguiente declaración de Pablo es apropiada: “Para su propio amo [Jehová] está en pie o cae” (cursivas nuestras).

Así que, aunque es un asunto de conciencia, debe considerarse las conciencias de los demás. Quizás a la vista de la congregación y la comunidad está mal que un hermano con privilegios de servicio se someta a la vasectomía, así que si lo hiciera quizás las personas le perderían el respeto, lo que haría que no llenara el requisito de ser irreprochable y de ser considerado de juicio sano, así que no calificaría como superintendente de la congregación. Pero, ¿qué sucedería si en su comunidad o su congregación no se vea mal el someterse a un procedimiento de esterilización? ¿O si nadie se entera de que usted se hizo la vasectomía? En ese caso no aplicaría el principio expuesto arriba. En todo caso, en vista de que esto no se ha aclarado en ninguna publicación provista por el “Esclavo Fiel y discreto”, ¿por qué no consulta con un anciano de confianza de su congregación, o con el superintendente de circuito? Es seguro que ellos podrán brindarle información valiosa e importante.

Aunque la reproducción es un maravilloso don que Jehová nos ha dado, la decisión de tener o no tener hijos, y el método que se elija para esto (obviamente, que no sea abortivo) es decisión de cada pareja y no nos compete entrometernos en ese asunto. Sea como sea, demostremos con nuestras palabras y obras que respetamos y agradecemos el don de la reproducción, don que nos dio Jehová, aquel de quien viene “Toda dádiva buena y todo don perfecto” (Santiago 1:17).

lunes, 8 de noviembre de 2010

¿CÓMO ENTONAR LOS CÁNTICOS ESTA SEMANA?

Esta nueva sección de nuestro Blog ha sido muy bien recibida. De hecho, con autorización de la administración de este Blog, otro Blog, www.elpueblodejehova.com, publica esta sección y publicó también el curso musical. Muchos hermanos se han beneficiado ya. Junto con la buena recepción del curso musical, algunos hermanos preguntaron, “¿Cómo hacer las notas con mi voz?” Hacer las notas con la voz de forma correcta requiere ensayo y estudios del tema, y es necesario que un maestro le guíe en este proceso. Sin embargo, para los hermanos que no tenemos una voz educada podría ayudarnos escuchar solo las notas de la melodía, sin acompañamiento. Por este motivo me alegra anunciar que a partir de esta semana podrá descargar las melodías de los cánticos que se usarán esta semana sin acompañamiento. En futuras publicaciones se darán algunas recomendaciones más.
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Cántico 018 — El fiel amor de Dios
Tipo de cántico: Canción espiritual.
Dirigido a: usted mismo.
Cómo cantarlo: Es un cántico que invita a meditar en las provisiones de Jehová mediante Jesús para saciar nuestra necesidad espiritual. Nos recuerda la responsabilidad que tenemos de llevar a otros las aguas vivas de la verdad. Cántelo con gratitud y sentimiento.
Una recomendación: Se eliminó un calderón en el estribillo. Ahora se canta sin hacer pausas. Véase la lección 12 del Curso Musical.

Cántico 113 — Agradecidos por la palabra de Dios
Tipo de cántico: Oración.
Dirigido a: Jehová.
Cómo cantarlo: Puesto que es una oración de agradecimiento, cántelo con gratitud.

Cántico 044 — El gozo de la cosecha
Tipo de cántico: Canción espiritual.
Dirigido a: La congregación y usted mismo.
Cómo cantarlo: Otra vez se nos recuerda la importancia de la predicación. Los campos del mundo está blancos para la siega, y tenemos el privilegio de ser guiados por los ángeles para recoger al “trigo”. Cántelo con gozo y resolución.
Una recomendación: Cerca del final del cántico se eliminó un calderón. Cante sin hacer pausas ni reducir velocidad. Véase la lección 12 del Curso Musical.

Cántico 119 — Ven a recibir ánimo
Tipo de cántico: Canción espiritual.
Dirigido a: la congregación.
Cómo cantarlo: Ya que el gran día de Jehová se acerca con rapidez es necesario estimularnos al amor y las obras excelentes en nuestras reuniones. ¡No las abandonemos! Este cántico nos recuerda los beneficios de ser constantes en nuestra asistencia a las reuniones. Cántelo con gozo y sinceridad.

Cántico 073 — Amémonos de todo corazón
Tipo de cántico: Canción espiritual.
Dirigido a: La congregación.
Cómo cantarlo: Recuerde que, aunque ese cántico se lo canta a los otros hermanos (porque usa la expresión “debes amar”), debemos pensar cómo nos afecta a nivel personal. Nos insta a evitar la hipocresía, a no esperar que nos den amor, sino a dar amor nosotros. A cuidar nuestras palabras y acciones y a cultivar amistad con las personas que aman sinceramente a Jehová. Su mensaje es muy fuerte, al mismo tiempo que tierno, así que cántelo con ternura, sinceridad y seriedad.
Una recomendación: Se han eliminado los legatos (también llamados “ligadura de expresión”). Así que ubique cada sílaba bajo cada nota. Vea la lección 3 del Curso Musical.

EL INSOMNIO PUEDE SIGNIFICAR LA SALVACIÓN DE SU VIDA

“Los atalayas de él son ciegos. Ninguno de ellos ha notado. Todos ellos son perros mudos; no pueden ladrar, jadeantes, echados, que aman dormitar”
—Isaías 56:10—

TIEMPO APROXIMADO DE LECTURA: 5 MINUTOS


“Otra noche sin sueño”, ¿le suena familiar esta expresión? Si usted padece de Insomnio o conoce a alguien que padece este trastorno seguramente ha dicho o escuchado esta expresión. El dormir es necesario para la regeneración de nuestro cuerpo. Está comprobado que el no dormir agrava o provoca muchos males, y cuando alguien padece de Insomnio crónico puede hasta morir con el tiempo debido a la falta de descanso del cuerpo ¡cuán grave es padecer de este mal! Sin embargo, ¿sabía que el Insomnio pudiera significar la salvación de su vida?

Es obvio que no hablamos del insomnio físico, sino del espiritual. Cuando una persona padece de un trastorno de sueño que impide que duerma lo suficiente, a la mañana siguiente seguramente se sentirá sumamente mal. En algunos casos hay personas que no pueden dormir en toda la noche y el sueño empieza a dejarse sentir alrededor de las 5 o 6 de la mañana, justo a la hora en que tienen que levantarse para atender el trabajo u otras responsabilidades y cuando los primeros rayos del sol dejan verse. Permanecer despierto a esas horas de la mañana es algo muy pesado y difícil. Espiritualmente es lo mismo. Analicemos una ilustración de Jesús que nos recuerda la importancia de estar despiertos.

Jesucristo habló de la importancia de quedarse despiertos, a la espera de la llegada del amo el día de su boda. Hoy es especialmente difícil mantenerse despiertos, porque la noche está muy avanzada. Jesucristo, en su ilustración de los esclavos que esperan a su amo habló de “vigilias”. La primera vigilia va desde aproximadamente las 6:00 PM. Cuando el sol se ponía hasta aproximadamente las 9:00 PM. La segunda vigilia empezaba al finalizar la primera hasta aproximadamente la media noche. La tercera vigilia desde la medianoche hasta más o menos las tres de la madrugada, y la cuarta y última vigilia desde las tres de la madrugada hasta la salida del sol, aproximadamente a las 6:00 AM. Jesús dice: “¡Felices son aquellos esclavos a quienes el amo al llegar halle vigilando! Verdaderamente les digo: Él se ceñirá y hará que se reclinen a la mesa, y vendrá a su lado y les servirá. Y si llega en la segunda vigilia, sí, o en la tercera, y los halla así, ¡felices son ellos!” (Lucas 12:37). Al hallarlos despiertos a esas horas de la madrugada, el amo pronuncia felices a sus esclavos. ¿En qué vigilia nos encontramos ahora? ¿En la primera? ¿En la segunda? ¿En la tercera? Bueno, veamos los hechos históricos.

El apóstol Pablo dice: “La noche está muy avanzada; el día se ha acercado” (Romanos 14:12). Entonces, seguramente no podríamos estar en la primera vigilia, pues la noche está “muy avanzada” y “el día se ha acercado”, ¿qué hay de la segunda? Bueno, Jesucristo evidentemente no señaló que durante la segunda llegaría el amo, pues dijo: “Y si llega a la segunda vigilia, sí, o en la tercera, y los halla así, ¡felices son ellos!”. Es obvio que Jesús no estaba dando una forma de medir cuándo vendría, pues esto se descubriría al tiempo apropiado. Sin embargo, hay razones sólidas para creer que, efectivamente, “vino” durante la tercera vigilia. Después de dar esta ilustración, Jesús pasó a decir: “¿Quién es verdaderamente el mayordomo fiel, el discreto, a quien su amo nombrará sobre su servidumbre para que siga dándoles su medida de víveres a su debido tiempo? ¡Feliz es aquel esclavo, si al llegar su amo lo halla haciéndolo así!” (Lucas 12:42, 43). La clase del “mayordomo fiel” apareció a finales del siglo XIX y estaba dando el alimento, sí, “víveres a su debido tiempo” mediante publicaciones como la Zion’s Watch Tower (La torre del vigía de Sión), Food for Thinking Christians (Alimento para cristianos pensadores), The time is at Hand (El tiempo se ha acercado) y muchas otras. Jesús entró en el poder del Reino en el año de 1914, año en que empezó a amanecer “el día del Señor” (Revelación 1:10). Jesús no señaló en qué parte de la tercera vigilia vendría, si al principio o al final, pero evidentemente ya no estamos durante la tercera vigilia, pues Jesucristo ya ha pronunciado feliz al “mayordomo fiel” y lo ha nombrado sobre “su servidumbre para que siga dándole su medida de víveres”. Las negras nubes de la guerra, la peste y el hambre azotaron al mundo desde 1914. Sin embargo, unos tres años y medio después de octubre de 1914 se cumple otra profecía que nos indica en qué vigilia vivimos ahora: “Porque es el tiempo señalado para que el juicio comience con la casa de Dios” (1 Pedro 4:17). Este juicio empezó cuando vino Jehová Dios, con su mensajero del pacto, Jesucristo, en la primavera (marzo-abril) de 1918, cumpliendo la profecía de Malaquías 3:1. Como el juicio empezó por “la casa de Dios”, es decir, por la Cristiandad, tras examinar las organizaciones que afirmaban ser el tempo de Dios, Jehová y Jesucristo determinaron que en la cristiandad no había grupo alguno que se hubiera mantenido alerta. Encontraron a un pequeño grupo apartado de la cristiandad que sí estaba dando alimento a la casa de la fe. Durante un período de duras pruebas, el resto ungido de Estudiantes de la Biblia fue nombrado sobre todos los bienes del amo en el año 1919 (Mateo 24:47). Estos hechos nos ayudan a determinar cuándo vino el amo y en qué período vivimos. Recordemos que el amo vino durante la tercera vigilia —que va desde la media noche hasta aproximadamente las 3:00 AM—. Durante esta vigilia vino el amo Jesucristo con su padre a inspeccionar su “templo”, a limpiarlo y, al hallar al “mayordomo” despierto lo nombró sobre todos sus bienes. ¿Ha terminado ya la tercera vigilia? Evidentemente sí. Recordemos que la última vigilia va desde más o menos las tres de la madrugada hasta la salida del sol, que acontece alrededor de las 6:00 AM. Es sobresaliente el hecho de que junto con esta profecía que se cumplió entre 1918 y 1919 se da otra muy interesante: “Y a ustedes los que están en temor de mi nombre el sol de la justicia ciertamente brillará, con curación en sus alas” (Malaquías 4:2). Esta profecía que se cumple en Jesús, él es llamado “el sol de la justicia”. Como hemos visto, en 1914 empezó a amanecer el “día del Señor”, y aunque desde 1914 ha habido muchos problemas, desde 1918 en adelante se ha visto claramente el dominio de nuestro Señor Jesús sobre el resto ungido. Nos beneficiamos ya del resplandor de él en su papel de Sol de la justicia. ¡La noche está terminando! ¡Ya podemos sentir los rayos del Sol de la mañana! ¡Estamos en la última vigilia! Esta vigilia es la más dura, la más pesada, la más difícil de soportar despiertos si no hemos dormido en toda “la noche”. Sin embargo, vemos ya en el horizonte las bendiciones que el Sol de la justicia nos trae. De hecho, hoy ya disfrutamos de muchas de estas bendiciones. ¿Qué haremos, entonces, para no “dormirnos” durante esta última vigilia?

Encontramos una clave en las palabras del apóstol Pedro cuando dijo: “qué clase de personas deben ser ustedes en actos santos de conducta y hechos de devoción piadosa, esperando y teniendo muy presente la presencia del día de Jehová” (2 Pedro 3:11, 12). La expresión que se traduce “teniendo muy presente” (en griego: σπευδοντας την παρουσιαν της του θεου ημερας) se traduciría “apresurando la presencia del día de Dios”. Puesto que Jehová ya ha fijado el día en que vendrá su gran día no podemos hacer nada para que venga más rápido. Sin embargo, sabemos que cuanto más ocupados estemos, sentiremos que el tiempo pasa más rápido. Bien lo ha dicho el apóstol Pablo: “siempre teniendo mucho que hacer en la obra del Señor” (1 Corintios 15:58). Si ocupamos nuestra mente y energías en “la obra del Señor”, es decir, la predicación, la preparación para las reuniones y la asistencia a ellas sentiremos que el tiempo pasa más rápido, así evitaremos dormirnos en esta hora avanzada de la cuarta vigilia de la noche.

Como vimos, entonces, aunque el sueño físico es una gran bendición, el sueño espiritual no lo es. Ahora que está a punto de “amanecer” es más difícil que nunca mantenernos despiertos espiritualmente. ¡Nunca permitamos que el “dios de este sistema de cosas” nos distraiga y nos haga dormitar! Más bien, apoyemos a la clase del Atalaya que proclama por todo el mundo las buenas nuevas del Reino de Dios, ocupando nuestra mente y energías en esta obra, así evitaremos dormitar, y por lo tanto, evitaremos nuestra muerte cuando por fin amanezca el día de Jehová, grande e inspirador de temor.

martes, 2 de noviembre de 2010

¿CÓMO ENTONAR LOS CÁNTICOS ESTA SEMANA?

Cántico 022 — “Jehová es mi Pastor”
Tipo de cántico: Canción espiritual.
Dirigido a: usted mismo.
Cómo cantarlo: Cántelo Con confianza y ternura. Medite en la letra cuidadosamente, y, puesto que la última estrofa se dirige a Jehová, cante también con el debido respeto.
Una recomendación: La música ha sido modificada, especialmente en las notas compuestas por tres corcheas seguidas. Escuche con cuidado la melodía y ensaye concienzudamente.

Cántico 115 — “Éxito en tu camino”
Tipo de cántico: Oración.
Dirigido a: Jehová.
Cómo cantarlo: Al mismo tiempo que la habla a Jehová, también insta a meditar. Cada uno de nosotros debería preguntarse, ¿me esfuerzo por leer la Biblia todos los días y meditar en su contenido? Cántelo con Gratitud, dignidad y resolución.

Cántico 003 — “Dios es amor”
Tipo de cántico: Canción espiritual.
Dirigido a: La congregación.
Cómo cantarlo: Vea que en las primeras dos estrofas habla de su propia resolución para cultivar la cualidad del amor, y en la tercera le habla a la congregación, al emplear las expresiones “dejes”, “tu”, “sigue”, “ama”, y “ti”. Recuerde que, antes de aplicarle a alguien más la letra, aplíquesela a sí mismo. Es un cántico que debemos cantar con Resolución y ternura.

Cántico 020 — Bendice nuestras reuniones
Tipo de cántico: Oración.
Dirigido a: Jehová.
Cómo cantarlo: Puesto que es una oración en la que pedimos la bendición de Jehová sobra nuestras reuniones, es necesario meditar en la letra y pensar, ¿Realmente presto atención a las intervenciones que se dan desde plataforma y los comentarios de los hermanos? ¿Me esfuerzo por participar lo más que puedo en la reunión, alabando así a Jehová? ¿Contribuyo a que la reunión sea edificante? Cante esta oración Con Fervor.

Cántico 121 — Animémonos unos a otros
Tipo de cántico: Canción espiritual.
Dirigido a: La congregación.
Cómo cantarlo: De nuevo nos hace pensar con seriedad en asuntos como la constancia con la que asistimos a las reuniones y la importancia que les damos. No deberíamos dejar de reunirnos pues las reuniones nos darán la fe que necesitaremos para sobrevivir al día de Jehová. Cántelo Con resolución y seguridad.

¿RECIBIRÁ SU JUSTA PAGA? Parte III

“Sus pecados se han amontonado hasta llegar al cielo, y Dios ha recordado sus actos de injusticia”
—Rev.18:5—

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Aunque el Papa Juan Pablo II ya ha pedido perdón por los pecados de la Iglesia, lo que incluye también las crueldades cometidas por la Inquisición, el daño ya ha sido hecho y no podrá nunca ser reparado.

¿Se ha visto afectada la Iglesia por sus acciones pasadas? Indudablemente sí. Es cierto que aún podría llamarse “La Poderosa Iglesia Católica Romana”, pues ejerce dominio sobre millones de personas, países y gobernantes. De hecho, su influencia aún se deja sentir en algunas decisiones tomadas por gobiernos poderosos. Sin embargo, su poder ya no es el mismo y nunca lo será. Si la Iglesia instituyera otra vez a la Inquisición, ¿tendría efecto real en el mundo? Claro que no, de hecho, hace unos siglos se trató de instituir de nuevo la Inquisición, pero el mundo ya había cambiado y la Iglesia había perdido su poder.

Estas acciones pasadas no solo han repercutido en la pérdida de fe en la iglesia, sino que también han acarreado deshonra al nombre de Dios, uno de los pecados más graves, y por el cuál deberá pagar con creces.

Debido a las injusticias de la Iglesia, así como de muchas otras religiones de la Cristiandad, hoy día muchas personas niegan la existencia de un creador amoroso. No solo por el hecho de que una Iglesia que dice representar a Dios cometa injusticias, sino porque sus injusticias las comete en nombre de Dios y de Cristo.

La Inquisición trató de suprimir a personas sinceras que tenían sed de la verdad bíblica, muchas de las cuales se atrevieron a criticar las enseñanzas anti bíblicas de la Iglesia. Se cumplió a cabalidad la profecía que decía: “La mujer estaba borracha con la sangre de los santos y con la sangre de los testigos de Jesús” (Revelación 17:6). No por gusto se pinta a la religión falsa como una prostituta repugnante, una enemiga de Jehová, Jesucristo, la Biblia y los cristianos verdaderos. Sin embargo, sus pecados no pasarían inadvertidos. Un ángel dice: “Sus pecados se han amontonado hasta llegar al cielo, y Dios ha recordado sus actos de injusticia” (Revelación 18:5).

La Biblia también profetizó la disminución del poder de la religión: “Y el sexto [ángel] derramó su tazón sobre el gran río Éufrates, y su agua se secó, para que se preparara el camino para los reyes procedentes del nacimiento del sol” (Revelación 16:12). Recuerde que la antigua Babilonia estaba protegida por el río Éufrates, y que, cuando Ciro el Persa conquistó la ciudad en el año 539 a.E.C. desvió las aguas del Éufrates y las “secó”, por así decirlo, para tener libre acceso a la ciudad. La Babilonia antigua cayó en una sola noche ante los medos y los persas. El ángel de Jehová explica que el agua representa las muchedumbres sobre las cuales ejerce dominio la religión falsa (Revelación 17:15). El tazón de la cólera de Jehová ya ha sido derramado, y las aguas se están secando. Cada año que pasa vemos más personas que retiran su apoyo a la religión. Aún cuando millones afirman ser católicos, ¿cuántos, realmente, dejan que la religión afecte en su vida, si no es en una boda, un funeral o una celebración popular? ¿Acaso su vida diaria se ve afectada por la doctrinas católicas sobre la planificación familiar, la homosexualidad, la fornicación y la borrachera? En la mayoría de los casos vemos todo lo contrario. Muchos se declaran abiertamente contra la religión, y los escándalos por abuso sexual por parte de Sacerdotes mueven la conciencia de otros. Poco a poco las aguas se secan, y esto solo es un indicio de que los “reyes del norte”, Jehová y Jesús, vendrán a destruir en una sola hora a esta repugnante ramera.

La Biblia declara sin rodeos la culpabilidad por derramamiento de sangre de la religión, “Sí, en ella se halló la sangre de profetas y de santos y de todos los que han sido degollados en la tierra” (Revelación 18:24). Vea la gravedad del asunto, no se le considera culpable solo de la muerte de fieles profetas y santos, sino que de “todos los que han sido degollados en la tierra”. Sin duda tiene una deuda muy pesada que pagar.

¿Es muy fuerte este mensaje? Podría ser, pero vea la exhortación que nos da la Palabra de Dios: “Páguenle a ella así como ella misma pagó, y háganle a ella el doble, sí, el doble del número de las cosas que ella hizo; en la copa en que ella vació una mezcla, vacíenle a ella el doble de la mezcla” (Revelación 18:6).

Es cierto que no tenemos autoridad para ‘hacerle el doble de cosas que ella hizo’ de forma literal, pero Jehová nos ha concedido la autoridad y el honor de proclamar su próxima destrucción.

Jehová mismo se encargará de ‘pagarle a ella así como ella misma pagó’, cuando las Naciones Unidas y los “diez cuernos”, es decir, el resto de gobernantes del mundo se cansen de su entremetimiento en asuntos políticos, y cual bestias feroces se lancen sobre ella a devorar sus carnes, y finalmente, quemarla por completo con fuego.

Hoy la religión falsa dice: “Estoy sentada [como] reina, y no soy viuda, y nunca veré lamento”, pero Jehová dice: “Por eso, en un solo día vendrán sus plagas: muerte y lamento y hambre, y será quemada por completo con fuego, porque fuerte es Jehová Dios que la juzgó” (Revelación 18:8).

Ese día se aproxima con rapidez, y si usted quiere librarse de esta destrucción siga el consejo que el ángel de Jehová dio: “Sálganse de ella, pueblo mío, si no quieren participar con ella en sus pecados, y si no quieren recibir parte de sus plagas” (Revelación 18:4). Es seguro de que usted está cumpliendo este mandato, y se ha dedicado a Jehová y bautizado y se reúne con el pueblo de Dios, pero, ¿realmente ha cortado todo lazo con la religión falsa? ¿Aún participa en festividades como los cumpleaños, o en costumbres basadas en supersticiones demoniacas, como el vestirse de negro para los funerales? Si así es, no dude en romper ya todo lazo con la Gran Ramera. De un momento a otro las calamidades le vendrán, y no querremos sufrir junto con ella. Recuerde, “en un solo día vendrán sus plagas: muerte y lamento y hambre, y será quemada por completo con fuego” (Revelación 18:8). Así que, huyamos de todo contacto con esta repugnante ramera religiosa, pues pronto recibirá su justa paga por todos sus actos de injusticia y maldad.