sábado, 6 de agosto de 2011

¿NECESITA AYUDA?

El conocimiento que Jehová nos proporciona mediante su organización terrestre no se compara en lo más mínimo al conocimiento que las iglesias de la cristiandad dan.

La organización de Dios lleva décadas proveyendo alimento espiritual a través de revistas, libros y folletos. Muchas veces sucede que nos topamos con preguntas cuya respuesta no encontramos, ¿qué haremos? Lo más recomendable es acudir a los ancianos de su congregación.

Si aún así la respuesta no ha quedado clara, o la respuesta se encuentra en una publicación muy antigua que no está a su disposición, siéntase libre de escribirnos, y con mucho gusto trataremos de darle ayuda.

También, si tiene dudas sobre cualquiér asunto musical relacionado con alguno de nuestros cancioneroes, especialmente
Cantemos a Jehová, y sobre cómo cantar correctamente nuestros cánticos, también nos gustaría ayudar.

Que la bendición de Jehová esté sobre todos ustedes, hermanos lectores, y que siga bendiciendo sus esfuerzos por servirle lealmente.

lunes, 1 de agosto de 2011

ENTENDIENDO LA ORGANIZACIÓN DE JEHOVÁ, PARTE 3 — LA SOCIEDAD

“Búsquense siete varones acreditados de entre ustedes, […] para que los nombremos sobre este asunto necesario; pero nosotros nos dedicaremos a la oración y al ministerio de la palabra”
— Hechos 6:3, 4 —

Era el año 1881 y desde hacía ya un par años la revista Zion’s Watch Tower se estaba publicando. Charles Taze Russell, quien entonces encabezaba la obra de los Estudiantes de la Biblia, vio necesario formar una sociedad que facilitara legalmente la distribución de Biblias, revistas y tratados, de ahí que se fundara la Zion’s Watch Tower Tract Society, actualmente conocida como Watch Tower Bible and Tract Society. Desde su mismo inicio esta sociedad fue vista como el conducto usado por Jehová para dar alimento espiritual. El libro Los testigos de Jehová… Proclamadores del Reino de Dios declara “que cuando La Torre del Vigía mencionaba ‘la Sociedad’ no se refería sencillamente a un instrumento jurídico, sino al grupo de cristianos ungidos que había instituido aquella entidad legal y que se valía de ella. De modo que la expresión significaba el esclavo fiel y discreto con su Cuerpo Gobernante” (página 219).

Durante años muchos hermanos usaron expresiones como: “la sociedad dice” o “la sociedad enseña”, teniendo el punto de vista expresado en el libro Proclamadores, ¿ha cambiado este punto de vista? ¿Es la “sociedad” lo mismo que el “esclavo fiel”? ¿Qué relación tiene con el Cuerpo Gobernante?

Recordemos que el “esclavo fiel y discreto” está formado por todos los cristianos ungidos que aún viven en la tierra, y es representado por el Cuerpo Gobernante de los testigos de Jehová. La Sociedad se fundó a fin de facilitar la labor de predicar las buenas nuevas del Reino predichas por Jesús y se fundó en 1880. Por otra parte, el “Esclavo Fiel y Discreto” predicho por Jesús se fundó en el año 33 E.C. cuando Jehová derramó espíritu santo sobre los 120 discípulos reunidos en Jerusalén. Esto hace evidente que hay una diferencia entre el “esclavo fiel” y “la Sociedad”. Aún así, durante el siglo pasado la Sociedad se veía como la representante de ese esclavo, por eso el libro Proclamadores decía que la Sociedad representaba a los ungidos que la formaron, así que era vista como el Esclavo Fiel y su Cuerpo Gobernante. No son sinónimos, pero la Sociedad se veía como la representante del Esclavo Fiel.

Teniendo este punto de vista, la función del Cuerpo Gobernante era apenas parecida a su forma actual y era constituido por la junta directiva de la Sociedad. La mayor responsabilidad sobre temas doctrinales recaía sobre el presidente de la Sociedad. Recordemos que el primer presidente fue Charles Taze Russell, sucedido por Joseph F. Rutherford, y este a su vez, sucedido por Nathan H. Knorr. Durante la presidencia de Knorr se vio necesario hacer un reajuste sobre este punto, pues según Hechos 15, la decisión doctrinal tomada sobre la circuncisión fue una decisión unánime (Hechos 15:25). Muchos cambios relacionados con la Sociedad se empezaron a realizar.

Antes del año 1944 únicamente los miembros de la corporación que hicieran una donación a la Sociedad podían votar para elegir a los siete directores de la Sociedad, pero en ese año, justo al final de las “dos mil trescientas tardes y mañanas” predichas en Daniel 8:14, se tomó una nueva medida: ahora los miembros de la corporación se limitarían a 500 y que estos deberían ser, en términos generales, miembros ejemplares y activos en la obra, que ahora podrían votar sin importar cuánto donaran a la sociedad. Esta medida sin duda fue una mejora, pero el problema persistía, los directores de la sociedad seguían viéndose como el Cuerpo Gobernante, y esto daba la apariencia que el Cuerpo Gobernante era elegido por votación democrática por los miembros de la corporación.

Para 1971 se empezaba a aclarar aún más este asunto. Durante la reunión anual de ese año se analizó la cuestión de la relación existente entre el Cuerpo Gobernante y los directores de la Sociedad. En esa reunión se explicó que las votaciones para elegir presidente, vicepresidente y secretario-tesorero de la Sociedad eran un requisito legal que el estado de Pensilvania exigía. Que la función de los hermanos escogidos como tales expiraría a cada tres años y que entonces se necesitaría una reelección. Esto difiere del Cuerpo Gobernante pues en primer lugar, el Cuerpo Gobernante no tiene ni vicepresidente ni secretario-tesorero, sólo un hermano que preside las reuniones. Además, la función como miembros del Cuerpo Gobernante es vitalicia y su elección no la hace hombre alguno, sino Jesucristo mismo. Esto deja algo muy claro: hay una gran diferencia entre la Sociedad y sus agentes, y el Cuerpo Gobernante.

Por su experiencia y madurez, casi siempre (si no es que siempre), los miembros de la corporación elegían a miembros del Cuerpo Gobernante como miembros de la junta directiva. Así que de todas formas, el Cuerpo Gobernante seguía estrechamente relacionado con la junta directiva, y por lo tanto, el presidente de la Sociedad seguía siendo el hermano más prominente, quizás de todo el mundo.

Tanto así que cuando N. H. Knorr murió y el hermano Fred Franz lo sucedió en la presidencia de la Sociedad, la revista Time declaró en su número del 11 de julio de 1977: “Aunque pocas personas conocen su nombre él ha adquirido poder mayor que aquel del Papa sobre 2.2 millones de almas alrededor del mundo”. Pero las cosas estaban cambiando, porque esa era la voluntad de Jehová.

Algún tiempo atrás el Cuerpo Gobernante había repartido responsabilidades a distintos comités, y eventualmente el presidente dejó de ser el miembro más prominente, al menos dentro del mismo Cuerpo Gobernante. Pasó algún tiempo antes que los hermanos de todo el mundo vieran de forma clara el cambio en la situación.

Al haber distintos comités supervisados por miembros del Cuerpo Gobernante el trabajo se realizaba bajo el entero Cuerpo, más bien que bajo la supervisión de un solo hombre. El papel de presidente de la Sociedad pasó de ser el puesto más prominente dentro de la Organización terrestre de Jehová a ser lo que realmente debió ser: un requerimiento puramente legal.

Este cambio evitó dar prominencia indebida a individuos y centrarse más en Jehová, Jesucristo y cómo mediante el espíritu Santo estos dirigen la obra a través una organización más que mediante un solo hombre.

Pero la situación se podía mejorar aún más. Durante todos esos años evidentemente la voluntad de Jehová era que los directores de la Sociedad fueran ungidos. Pero un cambio se avecinaba casi inesperadamente.

Como ha quedado claro en los párrafos anteriores, el Cuerpo Gobernante debe atender una labor puramente espiritual, mientras que la Sociedad una labor puramente legal. Cuando en el siglo I surgió un asunto con la repartición de alimentos, el Cuerpo Gobernante (formado por los doce apóstoles) dijo: “No es cosa grata el que nosotros dejemos la palabra de Dios para distribuir [alimento] a las mesas”, y luego dio las instrucciones que encontramos Hechos 6:3, 4 sobre buscar varones llenos de espíritu para que estos se ocuparan de los alimentos, mientras ellos se dedicaban al estudio y la oración. El Cuerpo Gobernante de tiempos modernos también siguió este ejemplo. Durante la reunión anual del año 2000 realizada el 7 de octubre se dio un anuncio impresionante: Ya no era obligatorio que los directores de la sociedad fueran ungidos, sino que ahora podrían llevar esta responsabilidad miembros de las “otras ovejas”. De hecho, actualmente el presidente de la Sociedad es un hermano con la esperanza terrenal.

Este cambio permite al Cuerpo Gobernante centrarse aún más en asuntos espirituales que dispensarán en forma de “alimento” a la congregación mundial de hermanos, mientras que los directores de la Sociedad se encargarán de los asuntos legales para facilitar la obra de predicar y publicar las Buenas Nuevas.

Todo esto nos ha ayudado a entender aún más cómo está trabajando actualmente el pueblo de Dios, y al mismo tiempo actualiza nuestro entendimiento sobre la Sociedad y el Cuerpo Gobernante, y por lo tanto, nos ayuda a pulir nuestro dominio del “lenguaje puro”.

Si usted revisa nuestras publicaciones de años recientes notará que ya no utiliza el término “la Sociedad” para referirse a la fuente de enseñanzas. Cuando se usa esta expresión se usa para referirse a la corporación Watch Tower. También notará que ya no se usan expresiones como “quien era presidente de la Sociedad en aquel entonces”, sino se ha cambiado por: “quien dirigía la obra en aquel entonces”. Estos detallitos nos ayudarán a estar al tanto sobre las nuevas "reglas gramaticales” de nuestro lenguaje, que progresivamente va mejorando.

Sin duda alguna, es un gozo servir en una organización progresiva, que está dispuesta a hacer los cambios que su amo Jesucristo dicte a fin de traer bienestar a la hermandad mundial, y dar honra, gloria y prominencia únicamente a aquel que la dirige: Jehová Dios.

viernes, 29 de julio de 2011

¿Podrá cantarlo bien? Cántico 97

En los principios del cristianismo el canto se destacó en la adoración verdadera. Jesús y sus apóstoles cantaron juntos después de la cena, en la víspera de la muerte de Jesús. (Marcos 14:26) Pablo y Silas, en prisión, cantaron en voz alta, y todos podían oírlos. (Hechos 16:25) Como David, el apóstol Pablo fue entusiasta del canto en la adoración. Más de una vez estimuló a sus compañeros de creencia a cantar canciones de alabanza a Jehová. (Efesios 5:18, 19; Colosenses 3:16)

En la adoración cristiana de hoy día el canto también se destaca. En 1905 se publicó el libro Hymns of the Millennial Dawn (Himnos de la aurora del milenio). La portada describe así sus 333 canciones o cánticos: “Una selecta colección de salmos e himnos y cánticos espirituales para ayudar al pueblo de Dios a cantar y celebrar con melodía en sus corazones al Señor”.

Después, en 1928, un libro de cánticos revisados suministró 337 canciones. Este libro se titulaba Songs of Praise to Jehovah (Cánticos de alabanza a Jehová), y su prólogo decía: “Se verá que estas canciones armonizan con las verdades divinas que han de entenderse ahora”. Sin embargo, al pasar los años y aumentar la luz de la verdad quedó claro que en algunos de estos cánticos influía el pensamiento de la religión falsa. Además, al darse más atención a la declaración pública de la fe se necesitaron canciones del Reino que animaran a predicar las buenas nuevas. (Mateo 24:14; Hebreos 13:15)

En 1944 se proveyó el Kingdom Service Song Book (Cancionero para el servicio del Reino), con 62 cánticos. Entonces, dos decenios después (en inglés en 1966 y en español en 1969), se presentó el libro Cantando y acompañándose con música en su corazón. Este contenía 119 cánticos del Reino que abarcaban todo aspecto de la vida y la adoración cristianas, enfatizaban el testificar activamente a otros y dirigían alabanza a Jehová Dios y Cristo Jesús.

Pasaron casi dos décadas, y la luz de la verdad siguió aumentando. (Proverbios 4:18) Hasta que llego aquel querido cancionero Canten alabanzas a Jehová (se publico en inglés en 1984; en español en 1986). Tenía 225 cánticos del Reino, y la letra y la música fueron compuestas, todas ellas, por siervos dedicados de Jehová de todas partes de la Tierra.

Tal como se nos menciona en la Biblia la luz se hace cada vez mas brillante, y es por eso que pasado los años, se observó que se necesitaba otro cancionero. Por eso, recientemente se publicó el cancionero Cantemos a Jehová, que contiene 135 melodías, muchas de las cuales son nuevas, y otras son del antiguo libro, pero con detalles mejorados.

Pero ahora… ¿Podrá cantarlos bien?
Si bien es cierto algunas melodías de los antiguos cánticos están aun vigentes debemos darnos cuenta que NO SON IGUALES, por lo tanto, hemos de ser cautos y no confundirnos al cantar, confiándonos de que aquella melodía se cantaba de cierta manera en el antiguo cancionero, ya que al encontrarnos con los cambios que se han realizado, confundiremos a los demás hermanos, y no cantaremos bien el cántico.

Es muy importante que, como se ha sugerido en diversas ocasiones por el esclavo fiel, ensayemos en nuestros hogares, nos demos el tiempo de poder escucharlos, y así llegar preparados a rendir alabanza a Jehová en canción, y que al mismo tiempo, a la hora de cantar los cánticos nos resulte mucho mas fácil.


¿PODRÁ CANTARLO BIEN? I parte.
Cantemos a Jehová: Cántico 97 ¡Adelante, ministros del Reino!
Canten alabanzas a Jehová: Cántico 43 ¡Adelante, ministros del Reino!

Muchos recordamos aquella hermosa melodía, que a la hora de cantarlo tanto en el salón del Reino como en las asambleas, orgullosos casi gritábamos ese hermoso estribillo loando a nuestro Dios Jehová.

Pero aquel cantico ya no sigue igual. Si bien es cierto que la melodía inicial es casi la misma, casi antes de empezar el estribillo, hay una alteración importante que cambia todo el sentido de la canción.

La parte que ya no es igual es la siguiente.

Escuche, versión antigua: “(…) Glorificar nuestro servicio, por la manera de vestir. Valor tiene el fiel ministerio queremos a Dios bendecir. (…)”

Escuche versión nueva: “(…) No existe mayor privilegio que estar al servicio de Dios. Por eso, no aflojen el paso, proclamen su fe con valor. (…)”

A continuación está el vínculo para descargar un audio de comparación. Tiene únicamente la porción del cántico que ha sido cambiado. Escuche y compare:

http://www.megaupload.com/?d=IOWYGFQB

Pongamos todo de nuestra parte para aprender, ensayar y cantar bien los cánticos. El esclavo ya ha hecho hincapié en aquello, existen las herramientas, pero… ¿podrá cantarlo bien?


Texto e ideas por Felipe Gutiérrez.
Audio por Hugo Ixlá.

viernes, 15 de julio de 2011

MUY PRONTO: ¿PODRÁ CANTARLO BIEN?

¿A quién no le ha sucedida? El presidente de la reunión dice: "Vamos a entonar el cántico número **", la melodía empieza a sonar, y confiados en que ya sabemos la tonada, empezamos a cantar. A medio cántico, nos damos cuenta que ya no vamos al paso de la música... "¿qué raro?" piensa usted.

Las razones por las que eso sucede son obvias. Ha habido cambios severos en nuestro actual cancionero Cantemos a Jehová, y aunque hay muchos cánticos "iguales", hay diferencias, en tonalidad o en algunas partes, en ritmo.

El "Esclavo Fiel y Discreto" nos ha recomendado ensayar en casa esas melodías. Aún así, muchos de nuestros hermanos de todo el mundo, no conocen de notación musical. Por eso, este Blog se complace en anunciar que, tras varias semanas de inactividad, se renovará con una nueva sección titulada: "¿Podrá cantarlo bien?" que explicará detalladamente las diferencias que ha habido en los cánticos que permanecieron de Canten Alabanzas a Jehová. Contendrá audios de comparación, para que usted se de cuenta por sí mismo, cómo se cantaba y cómo debe cantarse ahora.

Sinceramente, mi amigo Felipe Gutierrez y yo, esperamos que esta sección no sea sólo de ayuda, sino hasta divertida, y nos ayude a mejorar nuestras alabanzas a nuestro gran creador, Jehová.

miércoles, 18 de mayo de 2011

ENTENDIENDO A LA ORGANIZACIÓN DE JEHOVÁ, PARTE 2 — EL CUERPO GOBERNANTE

Pronto alcanzaremos la cifra de 8 millones de publicadores en todo el mundo. De forma casi milagrosa, estos 8 millones de personas armonizan su forma de vivir, pensar y enseñar según las normas bíblicas y se mantienen unidos en amor a pesar de las grandes diferencias raciales, étnicas, lingüísticas y económicas. ¿Cómo se logra esto? El apóstol Pablo instó a los corintios del siglo primero: “Ahora los exhorto, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, a que todos hablen de acuerdo, y que no haya divisiones entre ustedes, sino que estén aptamente unidos en la misma mente y en la misma forma de pensar.” (1 Cor. 1:10) ¿Cómo se lograría que persones de diferentes personalidades pensara de la misma forma? Obviamente, todos tenían que ser enseñados por la misma fuente: El Cuerpo Gobernante, quien fue nombrado por Jesucristo y era guiado por el espíritu santo. ¿Qué era el Cuerpo Gobernante? ¿Quiénes lo formaban? ¿Qué hacían? Y ¿Cómo cumple su función ese Cuerpo hoy día?

Tras morir Jesucristo y ascender al cielo derramó espíritu santo sobre 120 discípulos reunidos en Jerusalén. Estos empezaron a hablar en lenguas y así empezó la mayor campaña de predicación que el mundo ha conocido. Pero Jesús había dicho que sus discípulos sería perseguidos, y pronto esto se convirtió en realidad. El libro de los Hechos capítulo 8 versículo 1 relata: “En aquel día se levantó gran persecución contra la congregación que estaba en Jerusalén; todos salvo los apóstoles fueron esparcidos por las regiones de Judea y de Samaria.” ¿Por qué permanecieron en Jerusalén los apóstoles? El relato no lo dice claramente, pero los capítulos posteriores nos ayudan a entenderlo.

Recordemos que, siendo los apóstoles los amigos más cercanos de Jesús, fueron estos los que lo escucharon más de cerca y por más tiempo. Ellos presenciaron sucesos con Jesucristo que nadie más vivió, así que eran los más capacitados para dirigir la congregación cristiana y guiarla en términos doctrinales y morales.

En el año 49 E.C. resurgió el tema de la circuncisión y si esta era o no necesaria para llegar a ser un cristiano acepto a Dios y obtener su espíritu Santo. Ya en el año 36 Jehová había derramado espíritu Santo sobre Cornelio, un incircunciso, pero aún así, la controversia continuaba. La forma en que se trató este asunto nos deja una gran lección sobre cómo estaba organizada la congregación cristiana primitiva. El relato señala: “cuando hubo ocurrido no poca disensión y disputa de Pablo y Bernabé con ellos [los partidarios de la circuncisión], hicieron los arreglos para que Pablo y Bernabé y algunos otros de ellos subieran a donde los apóstoles y ancianos en Jerusalén respecto a esta disputa.” (Hechos 15:2) Esto explica muy bien porqué los apóstoles no se esparcieron con los otros hermanos: Permanecieron unidos, como un cuerpo, en Jerusalén. El hecho de que el asunto fuera llevado a ellos y que se hicieran arreglos para que Pablo y Bernabé fueran a ellos para tratar el tema indica que en las congregaciones se les veía como autoridad doctrinal.

Este cuerpo de ancianos, al que llamamos “Cuerpo Gobernante” trató el tema dejándose guiar por el espíritu santo y examinando cuidadosamente las escrituras. Al concluir las deliberaciones todos estuvieron de acuerdo en algo: la circuncisión no es necesaria. Mediante cartas les informaron a las congregaciones cuál había sido su decisión. ¿Qué revela esa carta? La carta decía en parte:

“Dado que hemos oído que algunos de entre nosotros los han perturbado con discursos, tratando de subvertir sus almas, (1)
aunque nosotros no les dimos instrucción alguna, (2) hemos llegado a un acuerdo unánime y nos ha parecido bien escoger a unos varones para enviarlos a ustedes junto con nuestros amados, Bernabé y Pablo […](3) Porque al espíritu santo y a nosotros mismos (4) nos ha parecido bien no añadirles ninguna otra carga, salvo estas cosas necesarias: que sigan absteniéndose de cosas sacrificadas a ídolos, y de sangre, y de cosas estranguladas, y de fornicación.” (Hech. 15:24, 25, 28, 29)

Nótese cuidadosamente las partes resaltadas en negrita y cursiva. Esto revela 1) que el Cuerpo Gobernante tenía autoridad para nombrar maestros de la palabra de Dios. 2) Que deliberaron y se reunieron como Cuerpo para tomar una decisión 3) bajo la guía del espíritu santo y 4) que tenían la autoridad para decidir sobre asuntos doctrinales y morales que afectarían a los hermanos de cualquier congregación.

Siglos después de este suceso, a finales del siglo XIX se empezó a recolectar a la clase del “Esclavo Fiel y Discreto” predicho por Jesús. Estos dispensarían el alimento espiritual a los discípulos de Cristo (Mat. 24:45). ¿Quién ocuparía el puesto de “Cuerpo Gobernante”? Al principio el trabajo de dirigir la predicación y el de dispensar alimento al tiempo apropiado fue llevada por la Watch Tower Bible & Tract Society, dirigida por Charles Taze Russell. En ese entonces el papel del Cuerpo Gobernante sólo se veía de forma nebulosa. Sin embargo, al adentrarnos en el “día del Señor” —que amaneció en 1914— se fue entendiendo más claramente la Biblia, la necesidad de predicar, y por lo tanto, la necesidad de imitar la organización cristiana del siglo I. Aunque pasarían años antes de que el Cuerpo Gobernante tuviera la forma, y jugara el papal que juega actualmente, hoy, al igual que en el Siglo I, el Cuerpo Gobernante sigo dirigiendo la obra de predicar y lleva la pesada responsabilidad de enseñar a los hermanos de todo el mundo.

Hoy hay más de 11.000 personas alrededor del mundo que afirma ser del “resto” ungido. De estos 11.000 cristianos dedicados y ungidos siete son miembros del Cuerpo Gobernante, y este Cuerpo actúa en representación de la clase del “Esclavo Fiel y Discreto”. Los siete miembros del Cuerpo Gobernante son: Samuel Herd, Geoffrey Jackson, Stephen Lett, Gerrit Lösch, Anthony Morris III, Guy Pierce y David Splane. Este grupo de hermanos se reúne todos los miércoles (y en ocasiones de urgencia en otros días de la semana) para analizar asuntos de importancia para la entera hermandad mundial. Este Cuerpo no sólo dirige la obra de predicar, sino la inmensa tarea de proveer alimento espiritual a través de publicaciones, asambleas y las reuniones de congregación. Ayudados por comités, estos hermanos dirigen a los más de 7 millones de hermanos de todo el mundo. Ya que ha quedado claro quién es el Cuerpo Gobernante y qué hace, surgen otras preguntas como: ¿Qué es la “Sociedad”? ¿Qué papel cumple? ¿Qué relación tiene con el Cuerpo Gobernante? ¿Quién es el Presidente de la Sociedad? ¿Tiene este hombre más autoridad? Las respuestas a estas preguntas se responderán la siguiente semana. El tema será: “Entendiendo a la Organización de Jehová, Parte 3 — La Sociedad”

martes, 10 de mayo de 2011

ENTENDIENDO A LA ORGANIZACIÓN DE JEHOVÁ, PARTE 1 — COMITÉS JUDICIALES

“Con justicia debes juzgar a tu asociado.”
(Levítico 19:15)

Comité Judicial… su sola mención puede traer a la mente una extraña imagen de juicio, vergüenza y castigo. El hecho de tener una reunión a puerta cerrada con tres o cinco ancianos para tratar un pecado personal no parece ser una idea atractiva. Algunas personas se resisten a pensar en que estas reuniones sean realmente útiles. Otros, pensando lo de la misma forma, alegan que no hay base bíblica para la formación de tales comités. Note con cuidado el título de este tema: “Entendiendo a la organización de Jehová”. Ese es el objetivo de esta, y otras publicaciones que habrá las semanas que vienen, el de entender la organización de los testigos de Jehová a la luz de la Biblia. Esto implica examinar cuidadosamente si hay o no base bíblica para ciertas acciones, o para la existencia de ciertos cuerpos o comités. La primera parte se centrará en esto, en los comités judiciales. ¿Hay base bíblica para que existan?

Como siempre, antes de analizar el asunto en el contexto cristiano, lo analizaremos a la luz de las Escrituras Hebreas. Recordemos que en el antiguo Israel los “ancianos” del pueblo formaban un cuerpo de superintendentes, y que algunos de ellos actuaban como jueces y oficiales que administraban justicia al pueblo (Deu. 16:18-20; 19:12). Estos ancianos y jueces se encargaban de pecados serios como el asesinato, y aún de pecados en los que no se sabía quién era el culpable (Deu. 21.2-7). Lo interesante de todo esto, es que en esa época Jehová solía comunicarse directamente con Moisés. Aún así, Jehová se valió de humanos imperfectos para tratar estos asuntos en la nación de Israel para mantenerla pura.

Al morir Jesucristo el pacto de la ley fue abolido, como muy bien sabemos. Sin embargo, en las congregaciones siguieron supervisando los “hombres de mayor edad” o “ancianos”. Esta referencia no se aplicaba solamente a las personas que literalmente eran mayores que otras, sino que se refería al grado de madurez espiritual. La pregunta apropiada sería, ¿tendrían estos hombres derecho de juzgar asuntos de la congregación, lo que implica pecados personales? La respuesta la obtenemos de las palabras que el apóstol Pablo dirigió a los corintios.

Primero veamos si ellos tenían potestad para corregir problemas entre los miembros de la congregación. Con referencia a asuntos personales, es evidente que a los corintios no les importaba llevar a los tribunales a sus hermanos. Por esa razón el apóstol escribió: “¿Se atreve cualquiera de ustedes que tenga un pleito contra el otro a ir al tribunal ante hombres injustos, y no ante los santos?” (1 Corintios 6:1). Pero, ¿para qué se llevaría el asunto a “los santos”? Los siguientes dos versículos dicen: “¿O no saben ustedes que los santos juzgarán al mundo? Y si el mundo ha de ser juzgado por ustedes, ¿son ustedes incapaces de juzgar asuntos de ínfima importancia? ¿No saben que juzgaremos a ángeles? Entonces, ¿por qué no los asuntos de esta vida?” De esto respondemos a la pregunta, ¿tenían los ancianos potestad de juzgar asuntos de la congregación? La respuesta es un rotundo sí. La pregunta que más nos concierne ahora es, ¿tenían los ancianos de la congregación potestad para juzgar pecados ajenos?

El capítulo 5 nos da una respuesta muy clara. Todos conocemos muy bien el relato del hombre que vivía con la esposa de su padre. Pero fijémonos en la expresión que usó continuamente el apóstol Pablo al hablar de este caso: “Yo, por mi parte, aunque ausente en cuerpo, pero presente en espíritu, ciertamente he juzgado ya, como si estuviera presente, al hombre que ha obrado de dicha manera” (1 Corintios 5:3). Tras decir que debía entregar al malhechor a Satanás el apóstol habló de que es imposible cortar todo trato con los “fornicadores de este mundo”, pues tendríamos que salirnos del mundo para hacerlo, y eso es imposible. Así que debían cesar de mezclarse en la compañía de cualquier pecador impenitente que se hiciera llamar hermano. Hablando sobre esto el apóstol dice: “¿qué tengo yo que ver con juzgar a los de afuera? ¿No juzgan ustedes a los de adentro, mientras Dios juzga a los de afuera? ‘Remuevan al [hombre] inicuo de entre ustedes’” (v. 12, 13). Note cómo el apóstol vuelve a usar la expresión “juzgar” con relación al hombre pecador, pero ahora señala que la congregación juzgaba a los de adentro. Esto responde a la pregunta ¿tiene la congregación, en especial los ancianos, la potestad de juzgar pecados ajenos? La evidencia bíblica dice que sí. Y este es un arreglo existente desde el siglo I.

En el antiguo Israel los juicios eran públicos. ¿Debían hacerse juicios públicos bajo el arreglo cristiano? La Biblia no responde a esta pregunta. Hemos de tomar en cuenta que en el antiguo Israel los pecados crasos como el adulterio, la homosexualidad, bestialismo y apostasía se pagaba con la pena capital, y todo el pueblo participaba en matar al pecador. Bajo el arreglo cristiano esto cambió drásticamente. Si hay arrepentimiento, con la sangre de Cristo se limpia de cualquier pecado cometido (1 Cor. 6:9-11). Habiendo cambiado esto, pregúntese: “Si la idea de ser juzgado por los ancianos de la congregación no es muy atractiva, ¿lo sería más si los juicios fueran delante de toda la congregación, estando presentes familiares, amigos, conocidos y nuevos?” ¿Realmente sería amoroso si los pecados se expusieran públicamente?

Habiéndose analizado eso, ¿es cierto que no hay base bíblica para la existencia de comités judiciales? Los tiempos cambian, y también las necesidades del pueblo de Dios y el sistema que se usa para corregir defectos. No sabemos con exactitud cómo juzgaban los pecados crasos los ancianos del siglo primero, pero de algo estamos seguros: Jehová les designó la responsabilidad de juzgar en representación suya. Por eso, al igual que los jueces del antiguo Israel, los ancianos de hoy deben juzgar con justicia a sus hermanos (Lev. 19:15) sabiendo que si no lo hacen tendrán que pagar delante de Jehová Dios.

¿Verdad que es un privilegio estar en una organización que basa cada acción en el conocimiento bíblico disponible? Mantengámonos leales a esta organización y disfrutaremos siempre de la bendición de Jehová.

martes, 3 de mayo de 2011

¿Intenta usted bajar a Cristo del cielo?

“No digas en tu corazón: ‘¿Quién ascenderá al cielo?’, esto es, para hacer bajar a Cristo”.
(Romanos 10:6)

¿Cómo sería posible querer bajar a Cristo del cielo? Muchas dudas han surgido de las palabras dadas a los Romanos en el capítulo 10 de la carta escrita por el apóstol Pablo. Apropiadamente, el apóstol Pedro reconoció que en las cartas del apóstol Pablo “hay algunas cosas difíciles de entender” (2 Pedro 3.16), y es probable que las palabras de Romanos 10:6, 7 resulten un poco complicadas. Pero veamos, a la luz del contexto, qué quiso decir el apóstol y cómo nos afecta hoy día.

En el contexto encontramos al apóstol hablando sobre la ley mosaica y el nuevo arreglo Cristiano. Por eso, no extraña que a menudo cite directamente de las palabras de la ley. En realidad, las palabras de Romanos 10:6, 7 son una variante de las que encontramos en Deuteronomio 30:11-14. Allí dice en parte: “Porque este mandamiento que te estoy mandando hoy no es demasiado difícil para ti, ni está lejos. No está en los cielos, para que se diga: ‘¿Quién ascenderá por nosotros a los cielos y nos lo conseguirá, para que nos deje oírlo para que lo pongamos por obra? […]Porque la palabra está muy cerca de ti, en tu propia boca y en tu propio corazón, para que la pongas por obra”.

En otras palabras, no había excusa para que un israelita no cumpliera los mandamientos de la ley, porque las leyes estaban claras y cerca de ellos. En el caso de los padres israelitas, debían obedecer el mandamiento de enseñar la ley a sus hijos, pero antes debían grabarla ellos mismos en su corazón, y luego inculcarlas en sus niños (Deuteronomio 6:6, 7). De esa forma, la ley estaba cerca de ellos, en su propia boca y en su propio corazón.

Usando palabras similares, el apóstol Pablo dice: “No digas en tu corazón: ‘¿Quién ascenderá al cielo?’, esto es, para hacer bajar a Cristo; o: ‘¿Quién descenderá al abismo?’, esto es, para hacer subir a Cristo de entre los muertos”. Pero ¿qué dice? “La palabra está cerca de ti, en tu propia boca y en tu propio corazón” (Romanos 10:6-8). En otras palabras, así como los israelitas no tenían excusa para no conocer la ley, los cristianos tampoco tenían excusa para no conocer los mandamientos de Cristo y la fe en él. Ya que Cristo había bajado del cielo una vez, había muerto y resucitado, toda su labor debió quedarse plasmada en los corazones de los cristianos, de modo que ya no es necesario que Cristo vuelva a venir para enseñar la verdad. Como los cristianos de hoy, los cristianos primitivos tenían la responsabilidad de predicar estas buenas nuevas. Por eso, el apóstol Pablo les dice: “’La palabra está cerca de ti, en tu propia boca y en tu propio corazón’; es decir, la ‘palabra’ de fe, que predicamos” (Romanos 10:8). De modo que, tal como los padres israelitas tenían la ley en su corazón y en su boca al enseñársela a sus hijos, los cristianos debían tener en su corazón y en su boca la “palabra de fe” que predicaban.

Hoy, como en aquellos días, nosotros predicamos estas buenas nuevas sobre el Reino del Cristo, y proclamamos las bendiciones que nos traerá el futuro gracias al sacrificio de Jesús. Pero, ¿tenemos en nuestro corazón esas palabras de fe? Deberíamos. Sólo si tenemos esas palabras en nuestro corazón, nuestra predicación será eficaz. Así que, como la fe sigue a lo oído, tratemos de profundizar nuestro conocimiento de la palabra de Dios y las enseñanzas de Cristo. Así nunca caeremos en el error de creer que esas “palabras de fe” están lejos de nosotros, pues las predicamos de continuo cuando llevamos a las personas el mensaje de Jehová que les hará obtener la salvación (Romanos 10:13).

martes, 15 de marzo de 2011

Arreglos especiales para la conmemoración: Cánticos cantados a Cuetro voces, ¿le gustaría?

Estamos ya a mediados del mes de marzo, y dentro de más o menos dos meses tendremos el evento más importante del año: La conmemoración de la muerte de Cristo.

Abril es un mes que en muchos países marca el primer año de usar nuestro nuevo cancionero Cantemos a Jehová, y muchos usamos por primera vez como congregación ese cancionero en la Conmemoración del año pasado. Se nos animó a ensayar los cánticos 8 y 109 para esta fecha tan importante. Ahora bien, les tengo una propuesta: ¿Les gustaría ensayar estos cánticos, pero esta vez, con un arreglo para cuatro voces (soprano, contralto, tenor y bajo)? Aunque en un principio podría parecer algo complicado, si les gustaría hacer esto, por favor, dejen un comentario con su correo electrónico (este no será publicado) y yo me contactaré con ustedes para ayudarles con este proyecto.

Se necesita un grupo de hermanos, talvez en la cantidad que se dice a continuación(podría variar, esto sólo es un ejemplo):

3 hermanas con voces agudas (soprano)
2 hermanas con voces graves (contralto)
2 hermanos con notas agudas (tenores)y
dos hermanos con notas graves (bajos)

Si necesitan más detalles, no duden en comunicarse conmigo a travez de este blog.

Un último recordatorio: Si desean realizar este proyecto, sean discretos. Esto implicaría no tratar de llamar demasiado la atención.

Preparémonos, pues, con antelación para esta importante fecha, en la que recordaremos la máxima muestra de amor de nuestro Padre celestial Jehová, y de nuestro Rey celestial, Jesucristo.

domingo, 13 de marzo de 2011

Testimonio cabal del Reino de Dios

Ese es el título del libro que empezaremos a estudiar a partir de esta semana. Aunque se espera que ya lo hayamos leído, si todavía no lo hemos hecho aún, habrá mucha información nueva que nos resultará muy interesante.

Los hermanos que ya lo han leído concuerdan en que es un libro muy emocionante. Muchos hermanos comentan que cuando lo leyeron después de la Asamblea tenían que obligarse a dejar de leerlo por las noches.

Y es muy cierto. Nos relata el libro de los hechos de una forma detallada y emocionante, que nos hace vivir junto con los apóstoles la emoción y el gozo que sintieron, así como sus temores y anhelos. Al repasar el ministerio de los primeros cristianos, nos daremos cuenta de que sólo la organización de los testigos de Jehová sigue ese modelo hoy día, y reafirma nuestra fe en que Jehová está guiando al Cuerpo Gobernante y sus desiciones.

No hay duda de que sacará mucho provecho de este excelente libro. Le animamos, entonces, a prepararse con tiemp y cuidadosamente, a fin de entender al mayor grado posible cada lección semanal, y a ofrecer sus bien preparados comentarios.

martes, 8 de marzo de 2011

RECORDATORIO

Recuerden que pueden ver la sección "Cómo entonar los cánticos esta semana" en nuestra página de Facebook.

lunes, 21 de febrero de 2011

Melodías de los cánticos de esta semana

Semana del 22 de febrero de 2011.

La información sobre cómo entonar los cánticos de esta semana la encontrarán en nuestra página de Facebook. Vean la "ventanita" de Facebook al lado derecho.

Recuerden que estas solo son las melodías, no tienen acompañamiento. Esto va bien si desean mejorar afinación de notas.

Link para descargar las melodías: http://www.megaupload.com/?d=4VG7ZIL3

viernes, 18 de febrero de 2011

ANUNCIO

Primero que nada quisiera disculparme por haber dejado de publicar la sección semanal “Cómo entonar los cánticos esta semana”. Las actividades cotidianas y espirituales a veces hacen complicado el estar concentrado para redactar secciones como estas, así como hacer las melodías de piano sin acompañamiento para practicar con facilidad el cántico.

Como segundo punto quisiera anunciar un cambio que hará más fácil, tanto la redacción como la lectura de la sección sobre los cánticos. Este cambio consiste en que ya no se publicará en este blog la sección Cómo entonar los cánticos esta semana, si no que se publicará en nuestra página de Facebook. Se publicará como Nota y ya no será una publicación semanal, sino que se publicará dos veces por semana. Cada nota llevará el título Cánticos para EBC, EMT y RS (abreviaturas de Estudio Bíblico de Congregación, Escuela del Ministerio Teocrático y Reunión de Servicio) que se publicará entre los días lunes y miércoles, y Cánticos para el estudio de La Atalaya que se publicará entre jueves y viernes.

Este cambio entrará en vigencia a partir de la semana del 21 de febrero. En este blog se publicará semanalmente el link para descargar el archivo .zip con las melodías para ensayar los cánticos. ¿Qué diferencia hay entre esas melodías y las que se consiguen en www.jw.org? Si no las ha descargado nunca, quisiera explicar que la diferencia es que estas melodías no tienen acompañamiento, sino solo las notas que nuestra voz tiene que hacer. Esto hace más fácil ensayar los cánticos porque a veces los acompañamientos pueden confundirnos de nota, especialmente si no hemos entrenado el oído para distinguir tonos. De vez en cuando se publicarán sugerencias sobre cómo usar estas melodías.

En vista de la información contenida en el cuarto artículo de estudio de La Atalaya del 15 de diciembre de 2010 me gustaría aprovechar para animar a todos a seguir ‘esmerándose’ por alabar a Jehová con la voz, sin importar si esta es privilegiada por naturaleza, o si, como la mayoría, el canto no es nuestro principal talento (Salmo 33:3).

Reciban cariño cristiano y mis deseos de que Jehová siga bendiciendo el servicio que cada uno de ustedes presta en sus respectivas congregaciones.

Sinceramente,
Hugo Ixlá

martes, 18 de enero de 2011

¿CÓMO ENTONAR LOS CÁNTICOS ESTA SEMANA? Semana del 10 de enero de 2011

Cántico 077— Sepamos perdonar

Tipo de cántico: Canción espiritual

Tempo: Lento, sin apresurarse

Dirigido a: la congregación

Cómo cantarlo: Si le dijeran qué cualidad es la más difícil de cultivar, ¿cuál sería su respuesta? Muchas responderán que es el perdón. Y es que aunque creamos que sí podemos perdonar, es difícil borrar por completo una ofensa, especialmente si sentimos que el ofensor tenía toda la intensión de hacernos sentir mal. Jehová es el máximo ejemplo del perdón, ¿cuántas veces nos hemos dirigido a él suplicando su perdón? No obstante, debemos recordar que Jehová pone condiciones para que alcancemos su perdón, y una de ellas es que nosotros perdonemos a nuestros ofensores. Cante con sinceridad, y profundo aprecio meditando en la letra.


Cántico 116 — La luz va en aumento

Tipo de cántico: Canción espiritual

Tempo: Moderado

Dirigido a: - - -

Cómo cantarlo: Los testigos de Jehová estamos plenamente consientes de que la verdad bíblica se revela progresivamente. Si alguien no cree que esto sea así debería analizar cuidadosamente las profecías mesiánicas que se fueron revelando poco a poco a lo largo de miles de años. Hoy ya no estamos en expectación de la venida del Mesías porque este ya vino a la tierra, murió por nuestros pecados y hoy es un poderoso Rey que gobierna a su congregación desde 1914. La presencia de Cristo es un tiempo emocionante en el que la verdad brilla con más intensidad porque nuestro Rey, Cristo, comisionó al “Esclavo fiel y discreto” que nos alimenta a su tiempo. ¿Nos dejaremos guiar por la luz de la verdad progresiva, o nos resentiremos por los cambios efectuados, tanto en la congregación como en nuestro entendimiento bíblico? Cante con aprecio y confianza.


Cántico 007 — Dedicación cristiana

Tipo de cántico: Canción espiritual

Tempo: Lento

Dirigido a: Jehová

Cómo cantarlo: Sea que estemos bautizados o no, debemos replantearnos el asunto de nuestra dedicación constantemente. ¿Estamos consientes de que ya no vivimos para nosotros mismos, porque pertenecemos a Jehová? Esto, por supuesto, implicaría estar dispuestos a arriesgar la vida por nuestra fe si fuera necesario. Así que, ¿estaremos dispuestos a morir por obedecer los mandatos de Jehová, como su ley sobre la sangre? Hagamos honor a nuestra dedicación y pensemos en ello mientras cantemos este cántico. Cante con sinceridad, meditando en la letra.


Cántico 023 — Jehová es mi fuerza

Tipo de cántico: Canción espiritual

Tempo: Un poco lento

Dirigido a: Jehová

Cómo cantarlo: ¿En qué circunstancias necesitamos la ayuda de Jehová? Aunque hay muchas situaciones, debemos estar consientes que la fuerza de Jehová la necesitamos sobre todo, para predicar porque ese el objetivo de Satanás. Jehová no nos deja solos y nos ha dado la Biblia y la verdad revelada en la congregación, así que podemos confiar plenamente en que él será nuestra plaza fuerte. Cante con gratitud y firmeza.


Cántico 091 — Mi amigo, mi Padre, mi Dios

Tipo de cántico: Himno

Tempo: Lento

Dirigido a: - - -

Cómo cantarlo: ¿A quién va dirigido este cántico? No es a Jehová, ni a la congregación, y en cierta forma no es para usted mismo. Si piensa detenidamente en le mensaje se da cuenta de que es un cántico que expresa sus sentimientos hacia Jehová, como si estuviera solo meditando en cómo Jehová le ha ayudado. Aunque nuestros hermanos de edad avanzada se identificarán especialmente por este cántico el mensaje podría sernos útil, especialmente si atravesamos etapas de depresión o enfermedad física. Cante con sinceridad, ternura y sosiego.

martes, 11 de enero de 2011

¿CÓMO ENTONAR LOS CÁNTICOS ESTA SEMANA? Semana del 10 de enero de 2011

¿CÓMO ENTONAR LOS CÁNTICOS ESTA SEMANA?

Semana del 10 de enero de 2011


Cántico 050 — Dios nos enseña a amar

Tipo de cántico: Canción espiritual

Tempo: Lento, sin apresurarse

Dirigido a: la congregación; uno mismo.

Cómo cantarlo: Existe una infinidad de oportunidades de imitar a Jehová, la fuente perfecta de amor. Una cualidad que debemos cultivar es la de ser perdonadores, lo que implica no guardar rencor por las ofensas. Sin embargo, esto lo lograremos cultivar sólo si el amor domina nuestro corazón. Para lograr amar a las personas con sinceridad debemos andar con Jehová e imitar su personalidad. Cante suave, con ternura.


Cántico 073 — Amémonos de todo corazón

Tipo de cántico: Canción espiritual

Tempo: No muy lento, moderado.

Dirigido a: la congregación

Cómo cantarlo: ¿Se ha sentido alguna vez, solo, en la congregación? ¿Siente que a veces los hermanos no le muestran su amor como deberían? En ese caso, debemos recordar que el amor se centra, no en lo que nos dan, sino en que nosotros mismos demos. El cántico dice que “el amor no debe ser mucho desear y poco hacer”, así que, antes que esperar que los hermanos nos den amor, demos amor nosotros mismos. Cante con sinceridad, meditando en la letra.


Cántico 075 — Los motivos de nuestro gozo

Tipo de cántico: Canción espiritual

Tempo: Vivo

Dirigido a: nosotros mismos

Cómo cantarlo: ¿Qué razones hay para sentir gozo, a pesar de situaciones duras? Meditar en los regalos de Jehová puede ayudar. Primero que nada, nos ha dado una hermandad mundial que crece día con día. Nos ha dado su preciosa verdad que nos guía para tomar decisiones correctas, y lo mejor de todo, nos promete un futuro brillante bajo el reinado milenario de Jesucristo, ¿acaso no es suficiente? Cante con júbilo y vigor.


Cántico 095 — “Gusten y vean que Jehová es Bueno”

Tipo de cántico: Canción espiritual

Tempo: Moderado

Dirigido a: la congregación

Cómo cantarlo: Jehová promete que si le damos lo mejor él derramará abundantes bendiciones. Sin embargo, si nuestra fe decae, podemos dudar de esas promesas cuando atravesamos dificultades. Por eso, el cántico nos anima a gustar y ver qué tan bueno es Jehová. Especialmente los precursores y hermanos que sirven a tiempo completo han visto y vivido las bendiciones que Jehová promete, ¿no debería eso animarnos para confiar más en Jehová? Cante con sentimiento, meditando en la letra.


Cántico 089 —Jehová te exhorta: “Sé sabio, hijo mío”

Tipo de cántico: Canción espiritual

Tempo: Moderado

Dirigido a: ti, joven.

Cómo cantarlo: A diferencia de otros cánticos, en los que cantamos a la congregación o a Jehová, este cántico expresa lo que Jehová siente por ti, joven. Cuando lo cantes, siente el cariño que Jehová te tiene y cómo te pide que des algo a cambio: tu vida. Aún cuando las imperfecciones hacen que fallemos Jehová nos promete perdón, y aún cuando todas las personas nos abandonaran Jehová estará a nuestro lado. Canta con ternura, agradecimiento y devoción.


A continuación esta el link para que puedan descargarlos. Estos solo contienen la melodía principal –la que debemos cantar- y se omite el acompañamiento, a fin de no confundirnos.